Hay gustos de todo tipo, pero en esta entrada quiero defender la postura de aquellas chicas que deciden casarse con ramos preservados.
No tienen nada que envidiar a los frescos, son también bonitos, pueden tener colores vivos y son ideales para bodas de ambiente rústico y vintage.
Son la mejor opción cuando quieres regalar tu ramo y que esa persona lo pueda conservar durante tiempo como recuerdo de boda.
O también una gran opción como detalle de boda, regalando mini réplicas del ramo de novia.
Y son muy prácticos para bodas en verano, porque no te vas a tener que preocupar en absoluto de mantener el ramo y de si se va a deshidratar y va a deslucirse, y sobretodo en agosto, que es un mes en el que muchos talleres y florísterías cierran por vacaciones, teniendo tu ramo preservado encargado para recoger en julio, sabes que no vas a tener problemas con la entrega del ramo y desde entonces lo puedes tener ya en casa.
Son flores naturales, igual que las flores frescas, pero que han sido sometidas a un proceso de liofilización que las preserva. De las únicas flores que reniego SIEMPRE son de las flores de plástico, que tanto se ven en bodas en cinturones, adornos y tocados, que por muy bien hechas y muy monas, son de plástico (veneno).
Volviendo a las preservadas, si es cierto, que no todas las flores preservan bien y que no vas a encontrar todos los tipos de flor del mercado en su versión preservada, en eso deberás confiar en un experto/a que te sepa asesorar para elegir bien y que tu ramo tenga un aspecto lo más natural posible.
Os iré poniendo ejemplos, con comparativas de ramos frescos vs ramos preservados como prueba que pueden ser muy similares.
Éste ejemplo que habéis visto en la foto, es un ejemplo que encontré por
internet, muy sencillo y que me gustó mucho. Lleva rosas tipo vendela,
muy usadas en trabajos nupciales, por ser de un tono blanco crema
muy fino y delicado, limonium color violeta y toques de paniculata
blanca. Nada más, tres elementos y aunque no se ve en la foto, llevaba una empuñadura de rafia con un encaje blanco, también muy elegante y rústico a la vez, ideal para bodas en fincas en el campo.
Y
aquí, veis un ejemplo muy parecido que he hecho con flores preservadas.
No es exactamente igual, aunque se podría hacer, pero yo he incluido
eucalipto en lugar de paniculata porque no me gusta el olor del limonium
como flor preservada (huele a pis de gato, de ahí que otro de sus
nombres sea "Hierba de gato"), le pasa lo mismo como flor fresca tras
varios días de estar cortada y metida en bastante agua. El eucalipto
preservado, por contra, tiene un olor bueno, casi idéntico a su olor
cuando está fresco y recién cortado.
Y ya puestos, hice el conjunto de tocado a juego para la novia y los prendidos del novio y el padrino.
El tocado tengo que decir, que es para una chica que tenga su buena melena, porque me he tomado a mí como ejemplo, que tengo mucho pelo y puedo sujetar un tocado de ese tamaño, en caso contrario, habría que adaptar la medida a las necesidades de la interesada.
Y como apunte, me parece un ramo estupendo para alguna novia muy forofa del Real Madrid, porque lleva los mismos colores que su escudo.
Habrá más entradas con modelos preservados.
Hasta la próxima.